Esto se traduce en que siempre pretendemos outfits sencillos a ojos de cualquier mortal pero que, sin saber muy bien por qué , tienen un discreto efecto “wow” que es el que produce la elegancia natural.
Evitamos al máximo el efecto show y que alguien vista llamando la atención, es nuestra responsabilidad. Sin embargo, nuestro equipo sí sabe por qué ocurre este discreto efecto “wow”: tenemos en cuenta parámetros como el contraste, los volúmenes, los estampados, el patronaje, el color, el estilo, la forma del cuerpo de nuestros clientes, así como las tendencias; trabajamos con un fórmula propia que nos lleva a tal fin.